INOLVIDABLE momento del cine, inimaginable momento de la existencia, la voz de edith piaf. Le pusieron maravillosas y tristes imágenes de su grito desesperado,"yo se que seré una artista"Me hizo tener el ojo derecho con un rio de lagrimas durante sus más de dos horas de duración.
Marillon Cotillard demuestra una vez más la gran caracterización física de la escuela francesa, como también lo hiciera Anne Parrillaud en Femme Nikita, salvando las diferencias de personaje si.
1 comentario:
supe de tu historia heróica señor rompevidriosdeauto, por las testigos directas del café.
me reí, me acordé y te visité
salud
o.-
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